«Es solo cuestión de tiempo», decía hace poco más de un mes Jorge Campillo tras dos segundos puestos seguidos en sus torneos número 225 y 226 como profesional del golf. Nadie mejor que él, quizás su caddie, el también cacereño Borja Martín-Simo, para saber que la victoria, esa que llevaba buscando desde hace ocho años, estaba cerca. Y no se equivocó mucho. El domingo, en su torneo número 229, el triunfo llegó. El golfista extremeño estrenó con el Trofeo Hassan II su palmarés y de paso ha dado un gran salto tanto en el ranking mundial como en la Race to Dubai, la clasificación del Circuito Europeo.

«Espero que sea la primera de muchas», dijo Campillo minutos después de la victoria en Marruecos, un triunfo celebrado por toda la armada española en Rabat. Normal, es de los golfistas más queridos del circuito español. En el ranking mundial del golf ha ganado 25 posiciones respecto a la semana anterior para superar su techo, el puesto número 70 que hasta el domingo era su mejor clasificación. Ha iniciado esta semana en la posición 65, muy cerca del objetivo más próximo que se ha marcado: meterse entre los 50 mejores.

Es el cuarto español en esta clasificación mundial, solo por detrás de Jon Rahm (11º), Sergio García (29º) y Rafa Cabrera Bello (31º).

Grande ha sido también el salto en la Race to Dubai. Los casi 600 puntos sumados en Rabat le han llevado hasta la sexta posición, el mejor entre los españoles por delante de una leyenda como Sergio García, decimoquinto. Además, ya puede anunciar oficiosamente que tiene asegurada su presencia en la Final de Dubai de este año.

Campillo, que accedió al circuito profesional con diez triunfos en su bagaje como amateur, se había quedado al borde de la victoria en seis ocasiones, dos de ellas este mismo año (Omán y Qatar). Además, ha sido tercero en diez más, a lo que hay que sumar otros 17 top five y 28 top ten. En cuanto a los cortes, ha pasado 150 en los 229 torneos que ha disputado. En este 2019 ha competido hasta el final en todos los torneos que ha disputado.

Además, para esta temporada ha asegurado ya su presencia en uno de los major, torneos grandes, el PGA Championship de Nueva York, y es casi seguro también que estará en un segundo. En dos, el PGA y el British, estuvo el año pasado y su ‘discreta’ participación le dejó clavada una espina que ahora quiere sacarse. Ya sabe el camino, pues desde el domingo tiene cavada una espinita menos.

La confianza de su ‘caddie’

Quien tampoco tenía duda alguna de que esa victoria llegaría tarde o temprano es su caddie, Borja Martín-Simo. «Alguna vez le había dicho que me cortaba las dos manos si no ganaba algún día», dijo éste en declaraciones a la web especializada Ten-Golf, «y sabía lo que decía, porque no quiero cortarme las manos», añadió entre risas. Desde el año 2012 comparten penas y alegrías y sabe que llegar hasta este momento no ha sido fácil. «Hubo un momento, hace dos o tres años, donde dudó [Campillo] si valía para ganar. Tuvimos conversaciones muy largas. Desde entonces ha cambiado mucho, se ha hecho un ganador. La faltaba creérselo, y lo ha hecho desde hace un año y medio», añadió Martín-Simo, para quien las victorias, cuando cuestan tanto, «saben mejor».

Y ha costado. 229 torneos. «Espero no tener que esperar otros 229 para la siguiente», dijo Campillo. El camino para no tener que esperar tanto ya lo ha encontrado.