La cara B de la victoria del Cacereño el pasado domingo en el campo del Coruxo (0-1) la protagoniza Leo Ramírez, que lo siguió desde casa. Su entrenador, Angel Marcos, tomó la "decisión técnica" de dejarle fuera de la convocatoria por primera vez en toda la temporada, en la que era un titular fijo. A juzgar por los números, algo sorprendente pero que podría repetirse el domingo frente al Racing de Santander. Todo un enigma alrededor de uno de los jugadores que a menudo ha sido señalado como uno de los más talentosos de la plantilla.

Ramírez, un mediocentro de 1,95 de estatura cedido por la Unión Deportiva Las Palmas, era habitual en las alineaciones de Marcos. Fichó por el equipo verde iniciada ya la campaña y solamente en la tercera jornada, recién llegado, no fue escogido para formar parte del once inicial. Después, 26 partidos consecutivos como titular, con los únicos paréntesis obligados de las jornadas 16 y 26, cuando no jugó al estar sancionado. De esos 26 encuentros, solamente en cuatro no completó los 90 minutos.

Su primera vuelta resultó destacada, mostrando las cualidades que le llevan, sin ir más lejos, a tener un contrato profesional con un equipo de Primera División como Las Palmas. Su crecimiento como futbolista estaba resultando firme y contaba con la confianza total del técnico, que intentaba moderar algunos episodios propios de un jugador de 23 años. Por ejemplo, Marcos tuvo que calmar a Leo cuando fue expulsado en los últimos minutos del choque ante la Cultural Leonesa, en plena crisis del CPC. Tras cumplir su sanción, volvió a darle el mando del centro del campo.

Ante el Coruxo cambió de idea, en la búsqueda de que el rumbo del equipo, que parecía encaminado a Tercera, variase drásticamente. La llegada del holandés Hans Mulder y la posibilidad de reconvertir a mediocentro al defensa Ismael Athuman, curiosamente uno de los grandes amigos en la plantilla de Leo Ramírez, han dado al entrenador más opciones. En Galicia le salió a la perfección el plan. Está sobre la mesa que se repita la fórmula frente al Racing y el jugador grancanario, antes imprescindible, vea el partido desde la grada.