Después de la segunda etapa de la Vuelta Ciclista a Toleda, Adrián Alvarado se colocó como líder de las metas volantes y el Bicicletas Rodríguez Extremadura encabeza la clasificación por equipos.

La jornada entre Camarena y Guadamur tenía de 139 kilómetros dos dificultades montañosas, alto del Venta de Hoyos (3 categoría) y el Cerro de Palos de (2 Categoría). Como en la primera, la velocidad del pelotón marcó el devenir de la carrera. Dos escapadas de 16 corredores se formaron a lo largo del recorrido, siendo abortadas.

En el kilómetro 120 comenzaba el espectáculo, con el inicio del alto de Venta de Hoyos. Este puerto se subió a una velocidad endiablada, preparando las piernas para las primeras rampas importantes de la Vuelta en el Cerro de Palos. En este se formó un grupo de cabeza de diez corredores (Sánchez, Miguel, Branaa, Txoperena, Clavijo, Martín, Pinto, Gonzalez, Alberto Gallego y Edison Bravo, estos dos últimos del Bicicletas Rodríguez Extremadura) coronando con 45 segundos de ventaja sobre los perseguidores, que les sería más que suficiente para completar los nueve kilómetros restantes hasta la línea de meta sin miedo a ser cazados. En el esprint del grupo el más rápido fue el corredor del Cajamar Cristobal Sánchez, seguido de Sergio Miguel, y de Edison Bravo.

El Bicicletas Rodríguez Extremadura desarrolló en la carretera lo planificado la noche antes por su director, Alfonso Rodríguez. Es líder por equiops y Adrián Alvarado consigue el maillot azul de líder de las metas volantes.