Después de acallar las críticas sobre su rendimientos con los dos goles ante la República de Irlanda que clasificaron a Francia para cuartos, el delantero del Atlético de Madrid ha señalado que los primeros minutos de cada partido del equipo galo "siempre son malos o muy malos" y hay que arreglarlo porque "no es bueno para el corazón de los franceses" tener que resolver a última hora.