Todo un éxito". Así calificó el Cáceres Patrimonio de la Humanidad la intervención quirúrgica a la que ayer se sometió Mansour Kasse para recuperarse de su lesión en su muñeca izquierda. "Todo bien, sin percances", reiteraron en el club, que esperará al viernes, cuando el senegalés regrese de Tarragona --donde ayer fue operado--, para conocer el tiempo estimado de recuperación, aunque en principio parece difícil que pueda volver a jugar esta temporada.
La de Kasse será la única ausencia para el partido del viernes en el Multiusos ante el Oviedo (21.00 horas), un partido que la plantilla verdinegra encara con ganas de revancha por la derrota sufrida en tierras asturianas a finales de octubre. Hay cuentas pendientes, como reconoce Alvaro Frutos. "Perdimos de cuatro y no solo tenemos ganas de superarles, sino de ganarles el 'basket average' y adelantarse en la clasificación". El base es el único jugador que ha comenzado la semana con algunos problemas físicos. "Parece que vamos mejor, aunque sigo con molestias", indica. Entre algodones está Rolandas Jakstas. "Estamos cuidándolo", añadió Ñete Bohigas.
Sumar un nuevo triunfo es el único objetivo del Cáceres, que espera un partido duro. "Es un equipo que ha estado jugando a muy buen nivel, con una plantilla muy completa. Hacen buen baloncesto, muy agresivo atrás y dinámido delante. Se merece estar un puesto por encima de nosotros", reconoce Bohigas. Llegará el Oviedo a Cáceres sin su mejor jugador, Jordan Swing, que se ha marchado al CAI Zaragoza de la Liga Endesa.
