El Mérida no sale del barro y encaja una nueva derrota (2-1) , esta especialmente dolorosa al ser contra un rival directo, el Talavera de la Reina. Intentó reaccionar el conjunto romano, pero lo hizo cuando ya perdía por 2-0 y sin apenas tiempo para haber conseguido un empate que al menos hubiese aliviado sus penas.

Nada más empezar ya tuvo un acercamiento el Talavera. Fue una jugada por la izquierda culminada por Ángel López, que se sacó un zurdazo desde fuera del área que estuvo a punto de sorprender a Javi Sánchez, pero éste reaccionó con agilidad lanzando el balón a córner.

Respondió el Mérida en el minuto 11, cuando un pase filtrado sobre Pino fue bien controlado por éste, habilitádose una ocasión con su pierna derecha que se fue fuera por poco, llevando el susto a las gradas talaveranas.

DOMINIO LOCAL / Ganas había, desde luego, por parte de los dos equipos. Y buscaban la meta rival. El Mérida lo tenía más claro. Su idea era presionar la salida de los locales para no dejarles evolucionar. Eso sí, no siempre lo lograban. De hecho, poco a poco los locales empujaban a los emeritenses hacia su área, lo que significaba, en el momento de la recuperación, estaban muy lejos de la meta talaverana. Eso sí, los pocos acercamientos eran peligrosos y llevaban el nerviosismo a la zaga local.

Con el paso de los minutos la intensidad del choque fue descendiendo. El centro era el campo de batalla y ninguno de los dos estaba por la labor de ceder ni un palmo de terreno. Así las cosas, parecía que no quedaba más remedio que probar en jugadas a balón parado, que fue lo que hizo en el minuto 27 Ángel López, al botar una falta que se fue alta. Algo era algo. Más o menos a la misma altura, aunque tras una contra, salió la pelota enviada por Poley, culminado una jugada que generó muchas protestas por un posible fuera de juego que habilitaba una peligrosa ocasión para los extremeños.

De nuevo a balón parado fue el turno de los locales, y es que un centro de Ángel López fue peinada por Expósito obligando a Javi Sánchez a hacer una gran estirada para impedir que esa pelota se colara en el fondo de las mallas.

BUENA DEFENSA VISITANTE / Era el inicio de una tendencia, y era que el Talavera iba a dominar el choque. La posesión, desde luego, le acompañaba. Los de Diego Merino tenían claro que su prioridad era mantener su portería a cero y se encomendaron a esa labor. Con uñas y dientes se defendían, pero los talaveranos se envalentonaban cada vez más.

La segunda mitad empezó con similar inercia. Era el cuadro blanquiazul el que más poseía la pelota, pero el repliegue del Mérida era tal que había pocos huecos para rascar alguna ocasión auténticamente de gol. La historia se repetía y las oportunidades llegaban a balón parado, con Ángel López como protagonista y con idéntico destino: por encima del larguero.

Más clara fue la oportunidad del Mérida cumplida la hora de juego. Tras una buena conducción de Cubo, su pase a Santi Villa lo desaprovechaba en lo que parecía una buena ocasión.

Casi sin solución de continuidad, una llegada por la izquierda de Aguilera la cortaba Mario Gómez impidiendo el remate claro de Zamorano, eso sí, con la mano, detalle que no se le escapó al colegiado, que señaló penalti. Aguilera no se lo pensó mucho y cogió el balón para a continuación, transformar lo que significaba el 1-0.

Llegaba, al menos en teoría, el momento de que el Mérida saliera de la cueva. De nada le valía perder. Eso significaba conceder ocasiones en defensa, aunque estas llegaran por jugadas a balón parado. Así, tras una falta, el balón le cayó a Nandi, que se giró y envió el balón con la derecha al palo de la meta visitante.

Y unos minutos más tarde se rubricó ese mejor juego con un segundo gol para los blanquiazules. Llegó por una gran combinación por la banda derecha culminada con un pase de la muerte de Expósito que Aguilera rubricó en su segundo tanto con tu toque de calidad propio de un gran delantero, con un taconazo al fondo de las mallas.

Parecía todo hecho pero una desafortunada acción del meta local iba a abrir el partido a la emoción. En una jugada muy esquinada, Óscar Santiago cazó a Obama cuando era completamente innecesario, al menos, con la contundencia con la que lo hizo. Expulsión merecidísima. Jugar con diez lo pagó enseguida el equipo local. El Mérida atisbaba algo de esperanza y se volcó a sacar algo. Lo hizo a un minuto del tiempo reglamentario, cuando se topó con un centro de Pino que se quedaba muerto dentro del área y que Espinar enviaba al fondo de la portería.

Aún había algo de tiempo y estaba claro que el Mérida iba a tratar de aprovecharlo. Y casi lo consigue, cuando en un centro desde la izquierda, Barbero repelió de manera milagrosa dos remates de Espinar y de Pino que eran goles cantados, pero la suerte acompañó al Talavera.

talavera 2

mérida 1

3Goles: 1-0: min. 64, Aguilera, de penalti. 2-0: min. 83, Aguilera; 2-1: min. 89, Espinar.

3Árbitro: González Hernández (Castellano-Leonés). Roja al local Óscar Santiago (m.86). Amonestó a los locales Barbero, Juanra, Cidoncha y Sanjosé y a los visitantes Del Castillo, Poley y Mario Gómez.

3Estadio: Municipal El Prado.

3Espectadores: 600.

3Talavera de la Reina: Óscar Santiago; Exposito, Sanjosé, Nandi, Cristian (Aguilera, min. 58), Reguera, Zamorano (Barbero, min. 87), Juanra, Samu Corral, Ángel López (Sergio, min. 92), Cidoncha.

3Mérida: Javi Sánchez; Salvi, Mario Gómez, Álex Jiménez, Del Castillo (Obama, min. 71), Emilio Cubo, Mena, Pino, Poley (Espinar, min. 76), Cristo (Dani, min. 81), Santi Villa.