La pelota se queda donde estaba, en las manos de Lionel Messi, el que la tenía desde el año pasado. Nada ha cambiado. Leo sigue siendo el mejor futbolista del mundo y los méritos contraídos por Xavi Hernández y Andrés Iniesta --los mismos en cuanto a títulos que su compañero, con el añadido de la conquista del Mundial en las filas de España-- no han sido suficientes para derrocar a la estrella argentina, que recibió el trofeo por segundo año consecutivo. Con sorpresa --"no me lo esperaba", confesó-- pero con tranquilidad también. "Si no lo ganaba yo, lo ganaba uno de ellos", atinó a decir.

La gala de la FIFA resultó finalmente algo amarga para el fútbol español. No ganaron ni Xavi ni Iniesta --Luis Suárez tendrá que seguir esperando sucesor-- y tampoco el seleccionador nacional, Vicente del Bosque, ni el técnico del Barça, Pep Guardiola, en la particular lucha por el Balón de Oro para los entrenadores, que se llevó el madridista José Mourinho gracias a sus tres títulos con el Inter.

CAMINO DE LA LEYENDA Parco en palabras, a Messi le costó más que nunca hilvanar cuatro frases para expresar la felicidad que sentía al convertirse en el sexto jugador que logra dos veces el Balón de Oro. Por delante, con tres, aún tiene a Johan Cruyff, Michel Platini y Marco van Basten, a quienes podrá superar si mantiene su nivel de juego y le respetan las lesiones. Apenas cuenta 23 años (nació el 24 de junio de 1987), y ya ha igualado también a uno de los primeros mitos argentinos, Alfredo di Stéfano.

Guardiola fue el encargado de entregar el dorado balón a uno de sus pupilos. Mañana ese trofeo será exhibido con orgullo sobre el césped del Camp Nou. Messi se impuso con el 22,65% de los votos a Iniesta (17,36%) y Xavi (16,48%). Le votaron en primer lugar 45 de los 136 capitanes, 51 de los seleccionadores y solo 18 de los 154 periodistas participantes. Ni Samuel Eto´o ni Iker Casillas ni Cristiano Ronaldo ni Zlatan Ibrahimovic apostaron primero por el argentino. Javier Clemente (Xavi, Iniesta y Puyol), en nombre de Camerún, y Fabio Capello, por Inglaterra, ni siquiera le situaron en el podio.

"Me había descartado ante los pronósticos, pero estoy muy feliz", comentó, sorprendido, mientras portaba con problemas el galardón bajando unas escaleras --"pesa mucho", dijo-- antes de reunirse con sus padres, Jorge y Celia. "No lo esperábamos", corroboró el progenitor.

DECEPCION RELATIVA Por su parte, Vicente del Bosque se marchó de Zúrich sin el reconocimiento que esperaba tras vivir el mejor año de su historia con la conquista del Mundial de Suráfrica. "El valor del Mundial no nos lo quita nadie. Aquí no hemos perdido ningún partido, sino que veníamos a vivir una fiesta", dijo el técnico.

EL ONCE IDEAL El de Messi es el octavo trofeo que aplaudirá la hinchada azulgrana después de Luis Suárez, Johan Cruyff (dos), Hristo Stoichkov, Rivaldo, Ronaldinho y los dos de Leo.

El triunfo del Barça, con un podio completo igualando al Milan de 1988 y 1989, se amplió con la elección del mejor equipo del año, según la votación de los afiliados al sindicato internacional de jugadores. Sin ser el equipo con más aspirantes (ocho), superado por el Inter y el Madrid (nueve), hubo seis azulgranas en la alineación ideal. Además de Messi, Xavi e Iniesta, habían viajado para recoger su distinción Puyol, Piqué y David Villa. A su lado, Iker Casillas y Cristiano Ronaldo y los interistas Lucio, Maicon y Sneijder.