Rafael Nadal, número uno del mundo, viajó durante la jornada de ayer a Londres con el objetivo de reeditar el título en el torneo de Wimbledon y mantener, de esa manera, la distancia que le separa en la clasificación de la ATP del suizo Roger Federer.
Nadal ha viajado en un avión privado, según las fuentes del aeropuerto de Palma consultadas por la agencia Efe, debido a que con él llevaba varios aparatos especiales de rehabilitación para su rodilla derecha, que espera que le ayuden para poder aspirar a seguir haciendo historia en el torneo inglés.
El tío y entrenador de Rafa, Toni Nadal, explicó a Efe el lunes por la noche que tenían "varias opciones" para el desplazamiento hasta la capital londinense, pero que no se decantarían por alguna de ellas hasta casi última hora.
La incertidumbre del viaje de Nadal también sorprendió a varios periodistas, que al llegar ayer al aeropuerto de Palma para entrevistarlo fueron informados de que el tenista ya había volado a Londres "en un avión privado".
El número de uno del mundo espera hacer un buen torneo en Londres y ahuyentar las dudas sobre su problema físico que arrastra.
