El Sporting Villanueva Promesas intenta volver a la normalidad tras estar a punto de no salir en Segunda B y finalmente solventar su situación el pasado lunes. La aparición del inversor catalán Jordi García Rodríguez ha llevado la calma al equipo de Villanueva del Fresno, que parecía estar bajo un temporal.

García ocupará el puesto de Inés María Pérez en la presidencia del club, mientras que un hermano suyo, Francesc, se ocupará de la vicepresidencia que tenía otro Pérez, Javier. El entrenador del equipo, Albert Ferri, conoció el pasado lunes a los empresarios catalanes, hacia a los cuales se muestra agradecido "por poder sacar el equipo adelante. Ahora podemos empezar a encarar la temporada en serio".

El técnico tuvo a principios de esta semana el primer entrenamiento con los jugadores que ya habían firmado, pero eseta sesión se presentó más bien como "una primera toma de contacto". "Los chicos siguen ilusionados y con ganas de trabajar, son muy profesionales", declaraba el técnico sobre el plantel de futbolistas con el que espera empezar a entrenar "al cien por cien a partir de mañana por hoy o como muy tarde el jueves".

Ferri declaró que él trabajará con los jugadores de los que disponga y que intentará adaptarse a lo que tenga. "El equipo sigue teniendo el presupuesto más bajo de toda la liga de Segunda B pero hay que adecuarse a lo que tenemos. En el grupo IV hay muchos jugadores de calidad y por eso hay que trabajar mucho", señaló.

ULTIMOS RETOQUES Ahora, el equipo directivo está intentando conseguir un campo para realizar la pretemporada. "Todavía desconozco dónde será, pero el césped del estadio hay que conservarlo para la liga", comenta Ferri, quien también espera que el director deportivo, Pablo Cáceres, dé a conocer los destinos para los partidos de preparación para la inminente temporada.

La directiva es la que también se está encargando de conseguir a nuevos refuerzos que se unan a la actual plantilla de doce jugadores. Además, hay un trabajo extra: la búsqueda de las viviendas en las que los jugadores residirán durante la temporada, requisito que pidió Ferri para contribuir a un entorno "más familiar" en el equipo.