Al Villanovense le quedan 11 finales hasta el final de temporada, 33 puntos contra varios de los equipos que pelean la permanencia con ellos, pero también contra algunos de los favoritos al ascenso. Pero ya no hay tiempo para especular, porque los verdes necesitan la mitad de los puntos para asegurarse estar un año más en Segunda B, o también repetir los resultados obtenidos en la primera vuelta.

La primera de estas finales la tendrá mañana en Granada, a los que ya se les ganó en la primera vuelta. «Es una finalísima, tenemos siete enfrentamiento contra rivales directos, pero es que me da igual, porque el día que venga el UCAM va a ser otra final», aseguraba Julio Cobos tras el encuentro del domingo.

Así, serán finales los partidos contra Granada, Don Benito, Almería B, Jumilla, Sanluqueño, Malagueño o Sevilla Atlético, que se juegan no descender, pero también deberá sacar puntos contra Melilla, UCAM, Cartagena y Recreativo, los cuatro que están en puestos de playoff de ascenso.

Los serones suman 28 puntos. El objetivo es 45, una cifra con la que nadie ha descendido en la última década, excepto el Mérida la campaña pasada (tras playout). Así, parece que es mejor asegurarse 46 que los 45 de los que se suele hablar habitualmente. Al Villanovense le quedarían por conseguir 18 puntos de los 33 restantes. Eso supone cuatro o cinco victorias casi obligatorias y además rascar algunos empates.

Lo positivo para el Villanovense es que ya sabe lo que es sacar esos 18 puntos esta temporada y con el mismo calendario. Fue lo que hizo el equipo de Julio Cobos en la primera vuelta, en donde también se comenzó empatando contra la Balona. Es más, de repetir resultados, hasta se podría llegar a la última jornada con todo decidido a su favor. Además, tiene ahora la pequeña ventaja de partir en esta carrera con más puntos en comparación con sus rivales que en la primera vuelta, porque entonces estaba a cuatro puntos de la salvación y el playout y ahora está con los mismos puntos del cruce y a uno de la salvación.

Aunque aún queda mucha liga y muchos enfrentamientos directos. A pesar de los últimos malos resultados y del nerviosismo mostrado en parte de la afición el último domingo, el Villanovense tiene mimbres y ya ha demostrado que son capaces de revertir la situación. Ya lo han hecho una vez esta temporada.