Vicente del Bosque sigue fiel a la idea que llevó a la selección al éxito pero que también la condujo al fracaso en Brasil, víctima de un exceso de confianza y de una mala preparación. En estos dos años, han ido apareciendo nuevas piezas de la misma manera que otras se han quedado en el camino. Pero la columna vertebral del equipo se mantiene y se sustenta en los hombres del Barça, con Piqué, Busquets e Iniesta, más Alba de acompañante. Los azulgranas han sido la referencia de España en este ciclo glorioso y han marcado el estilo. No está Xavi, que optó por la retirada igual que Xabi Alonso, pero la mayoría se mantiene.

La gran novedad, el cambio en la portería, con De Gea desplazando a Casillas, ha dejado a Sergio Ramos como único madridista titular en el estreno. En el banquillo queda solamente Lucas Vázquez.

Uno de los que sigue siendo es David Silva, que ayer jugó su partido número 100, convirtiéndose en el séptimo futbolista en activo con más internacionalidades que encabeza Casillas (1º: 167 partidos), Ramos (3º: 132), Xabi Alonso (5º: 114), Fernando Torres (6º: 110), Iniesta (7º: 110) y Cesc Fábregas (8º: 107).

La victoria supuso romper el maleficio que perseguía a España el 13 de junio. En los partidos más recientes en esta fecha, sufrió la derrota ante Nigeria en el Mundial de Francia, ante Noruega en la Eurocopa del 2000 y la última, una de sus peores humillaciones, el 1-5 ante Holanda en el Mundial de Brasil.