En solo, en libre, en la rutina técnica o en un ejercicio libre y también, como ayer, por equipos. Las rusas son inalcanzables, lo volvieron a demostrar en otro ejercicio que rozó la perfección que les dio el oro por delante de España y de Ucrania. El tópico de la falta de creatividad en sus ejercicios lo han dejado atrás. Ayer, por ejemplo, firmaron un ejercicio magnífico, una recreación de un parque jurásico con una espectacular puesta en escena.

Además su técnica es exquisita y están a mucha diferencia del resto, como refleja la puntuación obtenida (97,400 puntos) y la diferencia respecto al segundo equipo, el español, que se quedó a 2,170 puntos y sumó su sexta medalla en estos campeonatos.

Las rusas bordaron otro espectáculo en el agua del Sant Jordi. Interpretaron un número que conocen bien, agotado seguramente para el próximo ciclo olímpico, que llevan tiempo mostrando al mundo, pero que no deja de sorprender actuación a actuación por su perfección.

Sin China, que no ha participado en los ejercicios por equipos en Barcelona, España tiene la puerta abierta para la plata. Se clasificó para la final con 94,100 puntos y tenían en Ucrania al único equipo que les podía hacer sombra para llevarse la plata. No fue así. España, a los acordes de Samsara , estrenaron una vistosa coreografía, afinaron más en las acrobacias y mejoraron su puntuación con respecto a la anterior actuación.