Todos los partidos, tres en total, del playoff de ascenso a la Segunda B, se van a disputar. O esa es, al menos, la previsión. La primera afirmación, que pudiera parecer de perogrullo, no lo es tanto teniendo en cuenta un debate que se ha generado entre los clubs y la federación en las reuniones de preparación de las citas del estadio Romano de Mérida los días 18, 19 y 25 de este mes.

La posibilidad de que el Extremadura B no se jugara nada, que ya es real ante la confirmación del descenso del equipo mayor de Segunda, había hecho que en los encuentros con la territorial se hubiera planteado, en un primer término, que el Villanovense pasara directamente a la final. O, que en caso contrario de que se disputara su duelo y ganaran los azulgrana, que la final no se jugase porque ya Coria y Cacereño habrán dirimido el 19 su partido, del que saldría el que subiera a la categoría de bronce por la imposibilidad del Extremadura B de conseguir el ascenso efectivo.

En todos los casos planteados, fuentes federativas consultadas por este diario insisten en que habrá encuentros en liza, «pase lo que pase, se jueguen o no algo», aseguran.

Mientras tanto, aún se desconoce cuándo se podrán volver a la venta las entradas si, como parece, habrá público para esos encuentros. La Junta de Extremadura, en concreto la Dirección General de Deportes, había paralizado la expedición de las localidades, pendientes del ok definitivo de Sanidad.

El visto bueno, según fuentes consultados por este diario, se producirá con total seguridad, a menos que se produzcan rebrotes realmente importantes. En estos días se revisa intensamente el protocolo para la entrada al estadio de los aficionados.