Hoy me parece saludable defender a los entrenadores, una especie rara dentro del complejo universo deportivo. He conocido ya a unos cuantos, unos muy buenos; otros muy malos pero la mayoría, en fin, supervivientes natos por encima de cualquier otra condición. Sí, estos tipos son supervivientes a la vorágine que se crea a su alrededor. Ahora, con el fenómeno internet en plena ebullición, se ven aún más acosados, ya que suelen ser el tempestuoso e irrespetuoso blanco de las iras de sus enemigos, casi siempre desde el anonimato, claro. Por contra, ni jugadores ni directivos suelen salir a defenderlos públicamente, excepto que se trate de situaciones límite. En Cáceres, está ´de moda´ ahora meterse con Piti Hurtado. El técnico del club de la LEB Oro de baloncesto, demasiado solo demasiadas veces, está resistiendo bien la presión exterior, quizá mucho mejor de lo que yo pudiera imaginar.Y en estos tiempos que corren, eso es una prueba de madurez, esta sí, una condición de la que los entrenadores no pueden prescindir porque si no se estrellan.