Raúl Albiol mostró la única sonrisa entre los internacionales españoles, tras confirmarse su traspaso al Real Madrid, aunque opta por no realizar declaraciones hasta que no sea presentado en el estadio Santiago Bernabéu a la conclusión de la Copa Confederaciones. El club blanco confirmó ayer oficialmente el traspaso, el segundo de un jugador español realizado por Florentino Pérez. La derrota en semifinales de España ante Estados Unidos dejó caras largas tras una noche en la que los internacionales asimilaron lo ocurrido después de 35 encuentros sin caer.

En la mañana libre, la mayoría de los futbolistas de la selección nacional se recluyó en su habitación y solo se dejó ver a la hora de la comida. Raúl Albiol se sintió el centro de atención. Entró al comedor acompañado de Carlos Marchena y respondió a las preguntas de la prensa con una sonrisa pero sin decir ni una palabra sobre el Real Madrid. "En su momento, cuando esté en Madrid hablamos del tema", respondió a la salida cuando se ´protegió´ entre un buen número de jugadores para completar los cien metros que separan el restaurante de las habitaciones.