Ya ha saltado la alarma. La derrota del Bernabéu activó la preocupación en el Bar§a, no tanto por la marcha del equipo, que aún es líder pese a los síntomas de debilidad mostrados ante el Chelsea y el Madrid, sino por Ronaldinho. Sus dos pésimas actuaciones han acentuado la sensación de que está en mala forma física. Un grave problema que exige una solución inmediata y que genera ya una perceptible inquietud en la directiva.

Como estaba previsto, Ronaldinho se somete desde esta semana a un plan de preparación especial. El astro se entrenará con todos, pero esas sesiones se verán complementadas con otras que realizará individualmente. La estrella del Bar§a necesita mejorar su estado físico, inferior al de sus compañeros por la carga de partidos que ha debido asumir y la falta de entrenamientos.

Ronaldinho no jugará mañana en la Copa ante el Badalona y, tal vez, tampoco se enfrente al Recreativo el sábado --no disputará los 90 minutos-- para llegar en buenas condiciones a la crucial cita del Chelsea (día 31) de la Champions. Después jugará en Riazor frente al Deportivo (5 de noviembre) y continuará los entrenamientos especiales la siguiente semana.

DESAPARECIDOLas ilusionadas expectativas de ver al mejor Ronaldinho en una fase importante de la temporada se han frustrado. Nadie le ha visto. Ni en Londres ni en Madrid, aunque resolvió el partido ante el Sevilla con dos goles (de penalti y de falta). En los últimos partidos demostró una nula capacidad de desbordar a sus marcadores, ni por habilidad en el regate ni por potencia en las arrancadas.

El cuerpo técnico prefirió correr el riesgo de alinear a Ronaldinho, aun sabiendo que estaba mal, porque es un futbolista determinante. No lo ha sido, a excepción del encuentro ante el Sevilla. El nivel de los rivales propició que se retrasara el plan individual hasta esta semana. Ayer, sin embargo, Ronaldinho hizo lo mismo de siempre después de cualquier partido. No salió al césped con sus compañeros para quedarse en el gimnasio.

Ahora Ronaldinho será uno más que habrá pasado por las rotaciones, con la finalidad que recupere el nivel que le convierte en el mejor futbolista del mundo. Rijkaard no quiso pronunciarse sobre su estado físico.

"Ronaldinho no está al cien por cien, pero es pronto porque llevamos siete jornadas y hay pocos jugadores que estén a tope", explicó ayer Sylvinho.