El Puebla no tuvo un buen inicio liguero ayer en la Superliga de fútbol femenino. El único representante extremeño en la división de oro nacional cedieron por un amplio 0-4 ante el Rayo Vallecano. El partido de ayer en terreno poblanchino tuvo dos caras: por un lado, la primera parte terminó con un ajustado 0-1, pero la segunda mitad fue un carrusel de goles en contra.

El punto de inflexión del encuentro fue un penalti en contra tras el descanso que supuso la expulsión de la guardameta Meli y que terminó en el 0-2.

Con el marcador claramente en contra y con una jugadora de campo, Cecilia, ejerciendo de portera, las locales ofrecieron más facilidades. Y es que el equipo poblanchino echó ayer claramente en falta tener una guardameta suplente, algo en lo que está trabajando el club. Con este panorama, Cecilia realizó un digno papel, pero el hecho de estar con una jugadora menos permitió al Rayo Vallecano llegar más asiduamente con peligro sobre el área.

Para el Puebla, este resultado supone un palo anímico, a pesar de que el potencial de las vallecanas las convierte en candidatas a estar en la pelea por el título para esta temporada.

Las locales crearon algunas oportunidades, pero en ningún momento fueron capaces de batir la meta rival. El próximo conjunto al que se tendrá que medir el Puebla será el Torrejón, equipo que no disputó ayer su encuentro al tener que enfrentarse con el Espanyol. Las blanquiazules se encuentran peleando por la Copa de Europa, por lo que la cita tuvo que aplazarse. El partido ante el Torrejón se jugará el domingo en feudo madrileño.