El técnico del Vecindario, Benigno Sánchez, reconoció irse feliz con el punto "porque veníamos con cinco bajas y jugamos con diez desde el inicio de la segunda parte. Mis jugadores se pusieron el mono de trabajo y sudaron el punto. Es cierto que nos faltó llegada, pero ni el Mérida nos dejó ni nosotros pudimos por el estado del campo".

Finalmente, Sánchez, que dirigió a su equipo desde la grada al estar sancionado, admitió que "el Mérida, ofensivamente, atacó más y mereció ganar".