Los tiempos en los que Fernando Alonso era el azote de Ferrari han quedado muy atrás. Los tifosi celebran su llegada y todo el equipo le da la bienvenida más esperada desde que Michael Schumacher colgó el casco. "Fernando sentirá muy cómodo entre nosotros. Yo sólo puedo decirle: bienvenido, Fernando", afirma Schumi, que, desde el primer momento, ha estado "involucrado" en el fichaje.

Y el asturiano llega para quedarse. En sus planes ya no se ven más escuderías que la de Maranello. "Será mi último equipo porque Ferrari es lo más grande. Después de Ferrari ya no hay nada", concluye solemne el bicampeón del mundo.

OPORTUNIDAD UNICA Hasta el miércoles mal disimulaba su secreto. Desde el miércoles a las cuatro, la sonrisa no se borra del rostro de Alonso. "Tengo una gran oportunidad delante de mí y estoy ansioso de que llegue el momento. Es el paso perfecto para que mi carrera sea completa". Y sigue. Es como un muchacho enamorado hablando de su nueva novia. "Sabes que llegas al mejor equipo del mundo, al más importante, al más prestigiosos, Está por encima de todos. Llego al equipo por excelencia del Mundial de F-1 y estoy sumamente feliz".

Es tan grande que, incluso, eclipsa la natural ambición de los pilotos. Tanto que Alonso ni se plantea una rivalidad en la pista con su nuevo compañero, Felipe Massa, con quien hace tiempo que zanjó aquella discusión del GP de España 2007. El año pasado apostó por él contra Lewis Hamilton y su abrazo en el podio de Brasil lo dijo todo. ±Independientemente de quién vaya a ganar entre nosotros, lo más importante es que el equipo sume los más puntos posibles. Ferrari es el único equipo del mundo en el que el equipo está por encima de los pilotos. Será una relación estupenda", añadió el español.

Así lo cree también el brasileño, que se recupera de su accidente con carreras de karts en Brasil: "Será la misma cosa que con Raikkonen. Yo no soy amigo de Kimi, pero juntos en la pista trabajamos bien. Alonso es un piloto sensacional. Vamos a trabajar bien en la pista y cada uno intentará hacer su mejor trabajo", recalcó.

Para que todo quede claro desde el principio, Stefano Domenicali, el director del equipo, establece las reglas del juego: "La llegada de Fernando no cambiará la política del equipo y los dos pilotos serán tratados por igual", declaró el asturiano.