Aunque oficialmente no ha terminado la temporada al no poder disputarse este pasado fin de semana la fase de ascenso adicional a Segunda División B, la Federación Española de Fútbol puede empezar a aclarar esta semana cómo será la atípica Tercera División de la temporada 2020-2021. El falto positivo en covid-19 de tres futbolistas del Marino (en una segunda prueba todos dieron negativo) impidió que se jugarán las dos finales previstas en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas y aún hay que dilucidar dos ascensos a la categoría de bronce. Tres en realidad, ya que también debe jugarse el Portugalete-Sestao River.

Aunque la Tercera es una categoría que gestionan las territoriales, depende de la nacional y es esta la que debe decidir su calendario y su formato. La fecha prevista de inicio es el primer fin de semana de octubre, siete días después que la Segunda B, y cada uno de los 18 grupos se dividirá a su vez en dos subgrupos.

En el caso de la Tercera extremeña se ha barajado la posibilidad de una división geográfica, ya que hay nueve equipos de la provincia de Cáceres (Cacereño, Coria, Moralo, Trujillo, Arroyo, Diocesano, UP Plasencia, Miajadas y Chinato) y trece de la de Badajoz (Extremadura B, Jerez, Aceuchal, Azuaga, Olivenza, Calamonte, Montijo, Fuente de Cantos, Llerenense, Valverdeño, Valdivia, Lobón y Campanario), aunque la que más gusta a todos los implicados es la de cremallera atendiendo a la clasificación de la temporada pasada, pues igualaría más el potencial de ambos subgrupos.

La competición se dividirá en dos fases, una primera de liga regular en cada uno de los subgrupos y otra segunda par dilucidar los que lucharán por el ascenso y los que descenderán de categoría. El formato exacto de la segunda no está decidido, aunque avisan desde la Federación Extremeña que será distinto al de Segunda B, ya que en su caso, además de ascensos a Segunda y descensos a Tercera, tiene que haber un tercer apartado para clasificarse para la futura Segunda B Pro.

En cuanto a la seguridad y la necesidad de test antes de los partidos, no hay nada claro aún y se espera a la evolución del virus antes de tomar decisiones en un apartado que puede acarrear un esfuerzo extra para la economía de clubs muy modestos.