La derrota del viernes en Melilla (78-64) quedó enterrada y el Cáceres Patrimonio ya prepara la doble cita de esta semana. Inequívocamente, los dos partidos consecutivos que disputará en casa servirán para saber si podrá luchar por entrar en los playoffs de ascenso. El miércoles ante el Planasa Navarra (aplazado en la vigesimotercera jornada) y el domingo frente al Leyma Coruña dictarán sentencia. O casi.

Serán cuatro días muy intensos en los que un doble triunfo supondría un gran impulso, uno solo no serviría para mucho y una doble derrota significaría decir adiós.

Visiblemente más fuerte en su pabellón durante toda la temporada (ocho de los doce triunfos han sido en casa y cuatro a domicilio), el Cáceres confía en seguir enganchado a algún tipo de aliciente en lo que resta de liga regular. La salvación, si bien todavía no es matemática, sí necesitaría de una improbable concatenación de resultados en las cuatro jornadas que restan.

Con el Palencia muy cerca de obtener matemáticamente el título y la plaza de ascenso, casi todo lo demás está por decidir. Melilla, Burgos y Oviedo tendrían la clasificación para los playoffs amarrada, mientras que a partir del quinto puesto, que ocupa el Leyma Coruña, al duodécimo, en el que está el Cáceres, solo hay tres victorias de diferencia.

Existen muchos enfrentamientos directos entre los equipos implicados. Además de los partidos en casa ante Navarra y Coruña, el Cáceres tiene partidos ante rivales directos: visitas a Breogán y Burgos y cita en casa frente al Palma Air Europa.