Sergio Ramos, defensa del Real Madrid, salió ayer en su defensa después de la dura entrada que le hizo a Messi durante el clásico del pasado lunes ante el Barça para aclarar que en ningún momento quiso hacer daño al argentino. El madridista admitió que se sentía "mal" por todo lo escuchado tras el partido, y resaltó que "para nada" quiso lesionar a nadie, en una comparecencia de prensa celebrada a petición propia.

"A lo largo de mi carrera los números están ahí y ningún futbolista puede decir que ha sido lesionado por Sergio Ramos", aseveró el sevillano, quien explicó que debido a la rapidez de Messi no calculó "bien la acción". No obstante, reconoció que se equivocó al dar la patada al argentino. Explicó además que también pidió disculpas por sus empujones a sus compañeros de selección Puyol y Xavi Hernández.

CRISTIANO, ´TOCADO´ El Camp Nou no solo va a tener consecuencias deportivas en forma de un resultado escandaloso. Ha dejado algún cadáver por el camino y éste no tiene otro nombre que el de Cristiano Ronaldo, la máxima figura de la galaxia merengue. El portugués sufre una fuerte contusión en el tobillo derecho con tenosinovitis de los peronéos, según rezaba el parte médico oficial, que le impidió asistir al entrenamiento de ayer y que le hace ser duda para el partido del sábado ante el Valencia. Es la segunda vez esta temporada que este tobillo le da problema.

Pero peor que el portugués lo tiene Higuaín. El argentino sufre una hernia discal que le podría dejar fuera de juego dos meses. A la espera de una segunda opinión, podría pasar incluso por quirófano.