SEVILLA 3: Palop; Daniel Alves, Escudé, Dragutinovic, Adriano; Jesús Navas (Koné, m.105), Poulsen (Maresca, m.91), Keita, Diego Capel; Kanouté y Luis Fabiano (Renato, m.78).

FENERBAHCE 2: Demirel; Gönül, Lugano, Edu, Vederson; Selçuk Sahin (Semih Sentürk, m.63), Aurelio; Deivid, Ugur Boral (Kazim Kazim, m.116); Alex (Bilgin, m.117) y Kezman.

GOLES: 1-0, M.05: Alves. 2-0, M.09: Keita. 2-1, M.20: Deivid. 3-1, M.41: Kanouté. 3-2, M.79: Deivid. Penaltis 3-2 a favor de los turcos.

ARBITRO: Busacca (Suiza). Amonestó a los visitantes Selçuk Sahih, Deivid, Gönül, Gökçek y Kezman y a los locales Keita y Daniel Alves.

El Sevilla cayó en la tanta de lanzamientos de penaltis de un partido que acabó con un 3-2 y un 5-5 en el total de la eliminatoria, pero en el que el Fenerbahçe turco fue mejor pese a ponerse al principio con un 2-0 adverso que hizo presagiar el pase a cuartos del conjunto español.

Los sevillistas arrancaron muy bien, aunque conforme avanzó el choque se vinieron abajo y mostraron grandes carencias defensivas, mientras que el rival le superó en todas las facetas y se hizo acreedor al pase.

La máquina hispalense salió engrasada desde el pitido inicial y a los tres minutos ya había puesto la eliminatoria a su favor con un gol de libre directo del brasileño Daniel Alves, en el que tuvo la inestimable colaboración del meta Volkan Demirel. Keita, con un zambombazo desde lejos, puso el 2-0 antes de que se cumpliera el minuto diez.

Fue entonces cuando el conjunto que entrena el brasileño ´Zico´ no tuvo más remedio que abrirse en busca de solucionar el entuerto y poner en evidencia a la defensa sevillista, muy frágil durante toda esta temporada.

El tanto de Deivid, a los veinte minutos (2-1), dejó el partido abierto, pues otro gol de los turcos les daba el pase. Alex y Verderson, sobre la media hora de juego, dejaron claro que el Fenerbahçe había tomado el mando ante un Sevilla con el centro del campo perdido y precipitado en sus acciones.

En ésta apareció el delantero malí Frederic Kanouté para aprovecharse de cierta pasividad de una defensa que ya demostró en Estambul que tampoco tiene demasiados recursos y puso el 3-1.

Tras el descanso poco cambió, porque el conjunto visitante siguió con dominio en el centro del campo y los centros sobre el área que defendió Palop pusieron el corazón en un puño a los seguidores.

SE ROMPE EL PARTIDO Con el transcurrir del tiempo, el encuentro se rompió definitivamente, porque el equipo estambulí atacó con todo y el Sevilla también se defendió con todo, pero siempre con inseguridad, lo que se tradujo en el 3-2 que igualó la eliminatoria en el minuto 79, obra de nuevo de Deivid en un nuevo fallo de la zaga.

El Sevilla se convirtió definitivamente en un flan en manos de un Fenerbahçe mucho más entero que no quiso ni forzar la prórroga, aunque sí se llegó al añadido de treinta minutos.

En la prórroga, el miedo a encajar un gol equilibró el choque y los dos equipos buscaron ese golpe con el que dejar hundido al rival, pero las fuerzas fueron ya muy escasas.

Fue el Sevilla el que más lo intentó conforme se acercó el final del tiempo reglamentario, pero la precipitación no fue aliada y se llegó a los lanzamientos desde el punto de penalti, que dejó a la suerte el vencedor, que fueron los turcos.