Dentro del proyecto ‘Quiero tocar el cielo’, que se enmarca dentro del proyecto global ‘Un mundo con sentido’, el extremeño Javier García Pajares, una persona sordociega, junto a su equipo, ha conseguido algo más que una hazaña: hacer cumbre en siete picos de más de 4.000 metros de altura en los Alpes en tan solo seis días (cuatro de actividad y dos de descanso).

El calendario que desarrollaron empezó el día 8 cima en la Pirámide Vincent (4.215 metros). Continuó el 10 culminando en Balmenhom (4.167), Corno Nero (4322), Ludwigshöhe (4.342) y Punta Parrot (4.436). Al igual que el 9, el 11 los tres escaladores descansaron para coger fuerzas de cara al Breithorn, de 4.164 metros, que alcanzaron el domingo 12. Por último, el lunes 13 consiguieron poner los pies en lo más alto del Pólux (4.092).

Según los orgnizadores de esta iniciativa, «cada día y cada montaña ha tenido sus propias peculiaridades» pero «ha sido una aventura de principio a fin donde la superación personal ha sido protagonista».

En medio de la alegría por el reto completado con no pocas dificultades, Javier García Pajares se permitió dejar unas palabras para el recuerdo: «Porque seré sordociego, pero puedo, y puedo porque quiero».