Manuel Mosquera, que seguirá siendo el entrenador del Extremadura, avanzó algunos detalles de lo que será la próxima pretemporada del equipo. La vuelta al trabajo está programada para los días 10 y 11 de julio, jornadas que están reservadas para las pruebas médicas antes del inicio de los entrenamientos. Así, los jugadores tendrán exactamente un mes de vacaciones, mucho más que lo que tuvieron el pasado año, ya que tras el ascenso apenas hubo descanso.

Una de las particularidades que tendrá la pretemporada azulgrana es que no tendrá concentraciones en el exterior. Es una exigencia de Manuel, quien argumenta que «lo mejor es darle normalidad y naturalidad. Tenemos dos campos espectaculares en la ciudad deportiva, un gimnasio, evitamos que los encargados del material estén siete noches sin dormir colocando cosas y además nos permite jugar con equipos de Extremadura, que es otra de nuestras ideas».

Durante la primera semana de entrenamientos no habrá concentraciones y se utilizará para jugadores a prueba y para filtrar a algún jugador que aún no haya resuelto tema de contrato. A partir de la primera semana, el equipo hará una concentración pero en un hotel de la ciudad. Será una concentración para estar juntos, con jornadas intensivas de trabajo, pero donde Manuel les permitirá que por las noches puedan dormir en sus casas.

Con respecto a los partidos, se diseñará un calendario de siete amistosos. Cuatro de esos partidos se jugarán en fin de semana y los otros en miércoles. La idea es ir de menos a más con rivales de Tercera, Segunda B, Segunda y Primera.

Manuel ha vuelto a recordar que la pretensión es hacer una plantilla corta (entre 19 y 20 jugadores) e ir ampliando con jugadores de la cantera.