REAL MADRID: Iker Casillas; Míchel Salgado, Iván Helguera, Pavón, Roberto Carlos; Flavio Conceicao, Makelele; Figo (Miñambres, m.91), Raúl, Zidane (Guti, m.68); y Ronaldo (Solari, m.83).

DEPORTIVO: Molina; Héctor (Víctor, m.68), Naybet, Jorge Andrade, Romero; Scaloni, Mauro Silva, Sergio, Fran (Luque, m.57); Diego Tristán (Valerón, m.57) y Makaay.

GOLES: 1-0, M.45: Zidane. 2-0, M.50: Ronaldo.

ARBITRO: Alberto Undiano Mallenco (Comité Navarro). Amonestó a Héctor y Figo.

INCIDENCIAS: Buen terreno de juego.

El Real Madrid, amparado en los goles del francés Zinedine Zidane y del brasileño Ronaldo Nazario, confirmó su liderato con un sólido y convincente triunfo por 2-0 ante el Deportivo, un equipo que se mostró romo en el Santiago Bernabéu y que ha quedado tocado en su lucha por el título.

El conjunto de Vicente del Bosque, brillante por momentos en ataque y muy efectivo en defensa, frenó la marcha de un rival que llevaba cinco triunfos seguidos, los que ahora suma el actual campeón de Europa.

El Deportivo trabajó mucho y estuvo bien en la presión, e incluso manejó durante más tiempo el esférico en la medular, pero le faltó llegada al área de Casillas.

Al Real Madrid, espeso en la salida del balón, víctima de Mauro Silva y compañía, también le costó crear peligro, pero la calidad general que atesora en su vertiente ofensiva le permite inquietar al rival con determinados zarpazos de inspiración.

En medio de una contienda sumamente igualada, en la que había demasiado respeto, el desequilibrio llegó al borde del descanso gracias a una acción veloz de Ronaldo que peleó por un balón perdido y tras recuperarlo cedió a Zinedine Zidane para que el galo rematara casi a placer dentro del área.

Pero cuando realmente apareció el brillo en el césped del Bernabéu fue en el segundo tiempo, en el que el Real Madrid desarboló a su oponente con fútbol de alta escuela, dirigido de forma primorosa por Zidane.

El francés resultó decisivo para la sentencia nada más iniciarse el periodo, porque fabricó una asistencia de lujo al centro del área, Raúl, listo como pocos, dejó pasar el balón y este llegó a Ronaldo, quien no perdonó y batió a Molina con un zurdazo raso.

A PLACER

Con tan clara ventaja el equipo de Vicente del Bosque poco menos que bailó al conjunto gallego durante unos minutos en una borrachera de espectáculo.

Irureta buscó soluciones en Valerón y Luque, quienes reemplazaron a Fran y Diego Tristán, y luego en Víctor en lugar de Héctor, mientras que Zidane, algo cansado y hasta ´tocado´ tras recibir una dura entrada de Scalini, dejó su sitio a Guti.

El Deportivo dio la sensación de estar bastante tocado, a merced del Real Madrid, porque hasta Makaay, un seguro de vida para los de Irureta, tuvo en sus botas entrar en el partido a falta de un cuarto de hora y disparó alto.

Al equipo que hace un año protagonizó en este escenario el Centenariazo en la final de la Copa del Rey le faltó la chispa. Pero lo peor para el Deportivo, que hasta este compromiso había marcado en todos sus desplazamimentos, es que el Real Madrid le queda ahora a seis puntos, que en la realidad son siete por la diferencia particular y que tras la eliminación continental esta derrota supone otro contratiempo.