El 1% de la población española percibe salarios entre 2 y 3 veces más elevados que los del 99% restante, según el último informe mundial sobre salarios publicado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Concretamente, el 10% de los que más cobra se lleva casi un cuarto de la masa salarial total, mientras que al 50% de los que menos cobran les corresponde el 30% de la masa salarial.

El informe indica que la brecha salarial crece en España entre distintos tipo de trabajadores, además de la ya conocida entre hombres y mujeres. Una de las conclusiones es que la desigualdad no solo se da entre las empresas sino dentro de ellas ya que, por ejemplo, tres de cada cuatro trabajadores gana por debajo de la media de su empresa.

El organismo internacional ha hecho un análisis de las retribuciones por hora trabajada que muestra el desequilibrio en las escalas salariales. Los trabajadores españoles que menos cobran reciben de media unos 3,5 euros por hora trabajada, mientras que los que más cobran, que están dentro del 1% de la población mejor pagada, perciben 55 euros de media, muy por encima del promedio del conjunto de España, que se sitúa en 22 euros la hora.

Las diferencias se mantienen también en las empresas donde las retribuciones son mejores. En ellas los empleados que menos cobran reciben 7,8 euros por hora y los que más, hasta 329 euros a la hora, unos 60.000 euros al mes.

La brecha salarial de género persiste y se acentúa en los niveles profesionales más altos. Las mujeres con cargos ejecutivos cobran un 40% menos que los hombres. Dentro del 1% de la población que más gana, las mujeres con cargos ejecutivos cobran hasta un 55% menos que los hombres con un puesto de la misma responsabilidad.

PODER DE COMPRA

El informe de la OIT se hace eco de que en el 2015 se produjo la primera subida de salarios desde el 2012, en torno al 1,6%, lo que supone una mejora en la medida en que la inflación evolucionó en negativo.

Joaquín Nieto, presidente de la delegación de la OIT en España, ha destacado, sin embargo, que si se tiene en cuenta el poder de compra, los españoles tienen el mismo poder adquisitivo ahora que el que tenían antes de la crisis, en el 2007. Por ello, consideran que la subida de los salarios "no ha sido real".

Además, el aumento de la productividad no ha sido suficiente para reflejarse en un aumento mayor de los salarios.

La OIT advierte que debe acabar esta desigualdad salarial así como el estancamiento de los salarios, "porque deriva en descontento social e inestabilidad política".

En cuanto al salario mínimo, la organización aplaude la subida del 8% para el año que vienen pero considera que la petición sindical de establecer una subida superior a lo largo de la legislatura es posible. "El crecimiento salarial todavía tiene margen de evolución", ha señalado Nieto durante la presentación del informe.