La tasa de desempleo en Alemania subió en enero a 4.623.100 personas, con un aumento del 1%, hasta el 11,1% de la población activa, y 398.000 parados más que en diciembre, el punto más alto de los últimos cinco años.

Este dato negativo pone de manifiesto que la mayor economía europea corre el riesgo de entrar en su segundo año de recesión. Las previsiones de crecimiento económico para el 2003 fueron rebajadas por el Gobierno hasta el 1%. Wolfgang Clement, ministro de Trabajo, reconoció ayer que la "situación del mercado del trabajo se ha degradado de forma dramática en enero". La tasa de paro en el oeste de Alemania pasó del 8,1% al 8,8%, mientras que en el este aumentó del 17,9% al 18,7%.

El presidente de la Oficina Federal de Empleo, Florian Gerster, manifestó que la evolución negativa del desempleo se mantendrá en febrero y que confía en una recuperación en marzo.