Bankinter registró un beneficio de 130,3 millones de euros en el primer trimestre de este año, lo que supone un descenso del 10,1% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, por mayores provisiones para prevenir por adelantado un posible deterioro del negocio por la crisis económica del covid-19, según informó ayer la entidad. «Hacemos votos para que el Gobierno acierte en las medidas que toma. Todavía no vemos cerca que hayamos doblegado la situación. Bankinter no se ha parado, pero estamos en modo defensivo», reconoció María Dolores Dancausa, consejera delegada del banco, en relación con la situación que vive la sociedad, el sector y el banco, durante la presentación de resultados.

La entidad considera que todavía no se ha visto el impacto real de la crisis en toda su amplitud, razón por la cual ha realizado provisiones de 107,3 millones de euros frente a los 55,1 millones del mismo periodo del 2019. De esas provisiones, 71 millones corresponden al coste de riesgo del trimestre, comentó Jacobo Díaz, director financiero, y dentro de estos, 20 millones de provisiones corresponden al impacto directo del covid-19. «No creo, sin embargo, que lleguemos a niveles de morosidad de la crisis anterior», comentó Díaz.

«El impacto del estado de alarma ha sido fuerte, así como la caída de los mercados. Esto ha provocado que se rompa la regularidad en el crecimiento trimestral de los resultados que se había producido hasta ahora», comentó la consejera delegada. «Tenemos que reconocer que no va a ser fácil mantener esa dinámica de crecimiento», agregó.

Aunque la actividad se ha deteriorado en el segundo trimestre del año, desde abril Bankinter ha intensificado su trabajo. Particularmente el relacionado con los créditos avalados por el ICO. «El banco ha realizado un gran esfuerzo para hacer frente a la situación generada por la pandemia» resaltó Dancausa. «Lo importante ahora es arrimar el hombro», aseguró. La consejera delegada avanzó que el banco no distribuirá dividendos en el primer semestre del 2020 y no tomará ninguna decisión sobre la política de reparto de beneficios con cargo al 2020 hasta al menos octubre, en línea con las recomendaciones del Banco Central Europeo (BCE).