El Barclays, el tercer banco del Reino Unido, confirmó ayer oficialmente a la Bolsa de Londres, haber iniciado "conversaciones exclusivas preliminares", para una posible fusión con el ABN Amro, líder en Holanda. Del resultado de esta operación, si finalmente se consuma, surgiría la quinta entidad bancaria mayor del mundo, con 47 millones de clientes, 220.000 empleados, en más de 50 países y un valor de mercado superior a los 120.000 millones de euros.

Una fuente cercana a las conversaciones, citada por la agencia Reuter, señaló que holandeses y británicos esperan resolver rápidamente el pacto, en el plazo de un mes, mientras el Financial Times indicaba que las dos entidades parecían haberse puesto de acuerdo en las líneas generales de la transacción.

La sede central del nuevo banco se ubicaría en Amsterdam; la entidad cotizaría en Londres y el equipo de dirección de Barclays, encabezado por John Varley, conservaría la mayoría de los puestos directivos.

La operación ha desatado rumores. Los analistas creen que el pacto tendría un gran sentido estratégico, al combinar las operaciones de ABN en EEUU, Brasil, Oriente Medio y Asia, con la experiencia de Barclays en la banca de inversiones, la gestión de fondos y las tarjetas de crédito.

Sin embargo, algunos de esos analistas creen que las posibilidades de éxito de los británicos son reducidas. La firma JP Morgan estima que Barclays podría pagar hasta 33,5 euros por acción de ABN y Merrill Lynch cree improbable que los holandeses acepten menos de 35 euros.

Aunque el Financial Times ve improbable que otras entidades europeas hagan ofertas. "Mientras algunos bancos como el Santander y el Royal Bank of Scotland están interesados en partes del ABM Amro, pocos parecen tener apetito suficiente para absorberlo en su totalidad", dice el diario. Otros analistas citados por The Guardian apuntaron una posible opa de Bank of America, uno de los pocos bancos capaces de comprar ABN Amro.

El banco holandés es objeto de rumores desde que, hace un mes, el fondo especulativo TCI, accionista de ABN Amro, propuso "un desmantelamiento, una escisión, una venta o una fusión" de la entidad. Tras esta afirmación, y desde entonces, la cotización ha subido el 22,16%. Ayer lo hizo el 3,47% y el Barclays, creció el 3,69%. Una fusión no debería implicar cambios en España. Barclays, con medio centenar de oficinas y 3.900 empleados, se centra en la banca minorista, orientado a empresas.

INTERES DE SANTANDER Y BBVA Por otra parte, el banco de inversiones Merrill Lynch opina que Santander y BBVA podrían pujar más alto que el británico Barclays por ABN Amro. La valoración se basa "en gran parte" en el marco fiscal español, donde se podrían beneficiar de deducciones de impuestos, según datos de la firma norteamericana.