"Adquisiciones tácticas" en el sur de EEUU para afianzar y potenciar el negocio en la región. Son las palabras del presidente del BBVA, Francisco González --recogidas por The Wall Street Journal el martes--, para definir la estrategia de la entidad española en el país. Ayer, el mismo rotativo desveló que el banco español será el adjudicatario de la puja para hacerse con el banco estadounidense Guaranty Financial Group, con lo que el BBVA incrementará su negocio en EEUU un 25%. Es la primera vez que un banco no estadounidense se hará con el control de una entidad local para salvarla de la quiebra.

Guaranty cuenta con unas 160 oficinas en Tejas y California, y disponía de cerca de 10.200 millones de euros en activos a 31 de marzo. Sin embargo, la situación financiera de la entidad es complicada: no ha presentado aún los resultados del 2008, aunque en junio comunicó al supervisor bursátil de EEUU que esperaba que las pérdidas estimadas inicialmente en 312 millones se elevaran a 1.600 millones. El motivo de su desplome: era un importante prestamista en California y compró valores apoyados en hipotecas. El valor de la vivienda era su salvia, y cuando los precios cayeron, el banco cayó con ellos.

Fuentes del BBVA consultadas por este diario ni confirmaron ni desmintieron ayer la adjudicación, aunque desde el mercado se dio por hecho que la Corporación Federal Aseguradora de Depósitos declarará al BBVA ganador de la puja. Según The Wall Street Journal , la operación se desarrollará en dos fases. Primero, una toma de control pública y luego una venta de activos al banco español.