La actual crisis petrolera es un problema global y por tanto requiere soluciones globales. Así resumió ayer su visión sobre la alarmante escalada del precio del crudo, el primer ministro británico, Gordon Brown. Desde las páginas del diario The Guardian , Brown pidió el establecimiento de un dialogo entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y los países consumidores, para atajar la situación actual. El mundo, señalaba en su artículo, se enfrenta al "tercer shock petrolero" y la solución, que no es fácil, solo llegará mediante "una estrategia mundial completa".

"En lugar de que la OPEP vaya por su propio camino, debería reforzarse el diálogo entre productores y consumidores sobre los avances de la energía nuclear, del carbón y de las energías renovables, sobre una mayor eficacia energética y el futuro de las reservas petroleras", señaló. El premier británico reclama "mayor transparencia de los productores y consumidores, de forma que se puedan comprender mejor" las tendencias del suministro y cómo estas afectan al precio del petróleo.

Brown llevará el asunto a la próxima cumbre del G-8, en la que participan los siete países más ricos del mundo junto con Rusia y propondrá un refuerzo de la colaboración a fin de lograr "un mejor diálogo sobre las posibilidades de suministro y las tendencias de la demanda".

RESPUESTA A LAS PROTESTAS El mensaje a la comunidad internacional del líder británico se produjo un día después de la protesta de cientos de camioneros en Londres, Gales y el Norte de Inglaterra, exigiendo, entre otras medidas, una reducción de los impuestos sobre el carburante, para poder hacer frente a la subida de los precios del diésel. De momento, el Ejecutivo dice "escuchar" a los transportistas, pero no ha respondido aún.

Brown se desplazó ayer a Escocia para participar en una reunión consultiva con los responsables de la industria británica del petróleo y el gas. Junto al ministro de Finanzas, Alistair Darling, insistió en que la crisis es "un problema mundial de oferta y demanda y no solo a corto plazo, sino a medio y largo plazo". De cara al futuro, abogó por una diversificación de las fuentes de energía, dando un mayor papel a la energía nuclear, que en estos momentos ocupa el 20% de la producción global en el Reino Unido y con un mejor aislamiento de edificios y viviendas. También pidió a los líderes del sector que presenten propuestas para subir la producción.

DESARROLLOS PETROLEROS El Gobierno aprobó la explotación de dos desarrollos petrolíferos en el Mar del Norte. Estos campos pueden producir 50.000 barriles diarios. El Gobierno planea mejorar la rentabilidad de otros 30 campos, con los que se lograrían 20.000 barriles.