La Comisión Europea admitió ayer que vuelve a interesarse por la oferta pública de adquisición (OPA) de Gas Natural sobre Endesa "por su impacto en el mercado interior europeo", la víspera de la vista de hoy en el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) de la demanda de la compañía eléctrica para que sea el Ejecutivo comunitario, en lugar del Gobierno español, quien tenga que autorizar la operación. La Comisión Europea reconoció en noviembre que habría deseado poder quedarse con la OPA de Gas Natural, si el reglamento de fusiones de la UE no se lo hubiera impedido al tratarse de una operación de ámbito nacional.

Una de las cuestiones que figuran en la misiva del comisario de Mercado Interior, Charlie McCreevy, al Gobierno sobre los nuevos poderes reforzados de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) es cuáles son las razones por las que se autorizó la OPA de Gas Natural sobre Endesa, a pesar de que el Ejecutivo comunitario admitió en noviembre que la operación era competencia exclusiva de las autoridades españolas debido a que más de dos tercios de su facturación se realizan en España.

TRATO DISTINTO En la carta de McCreevy también se plantea cuáles son las razones por las que se autorizó en su momento la OPA de Gas Natural y luego se modificó la legislación tras presentarse la OPA de E.ON, según precisaron fuentes gubernamentales españolas. La Comisión Europea estima que el reforzamiento de los poderes de la CNE puede obstaculizar la libre circulación de capitales y la libertad de establecimiento, garantizados por el Tratado de la UE.

La competencia en fusiones en la operación de Gas Natural-Endesa corresponde a las autoridades españolas, pero "eso no excluye que la Comisión Europea pueda plantear preguntas sobre otros aspectos de la operación, como el mercado interior", dijo el portavoz de la comisaria de Competencia, Neelie Kroes. El Ejecutivo comunitario "quiere tener una imagen clara de todas las operaciones" energéticas en marcha en España, precisó el portavoz de McCreevy.

COMPETENCIA EXCLUSIVA El Ejecutivo comunitario reclamó ayer su "competencia exclusiva" para analizar y autorizar la oferta de E.ON sobre Endesa, debido a su dimensión europea por las cifras de negocio de ambas compañías en estados diferentes. El portavoz de la comisaria de Competencia admitió que la firma alemana aún no había notificado la operación, pero insistió en que corresponde a la Comisión Europea y no al Gobierno español pronunciarse sobre esa OPA.

La Comisión Europea, dijo el portavoz de Kroes, actuará contra el Gobierno si "bloquea indebidamente" la oferta de E.ON. El Gobierno, añadió, puede invocar "intereses legítimos" al margen de las cuestiones de competencia para rechazar una operación, pero esos intereses deben ser compatibles con el Derecho comunitario. El comisario McCreevy, por su parte, esperará a recibir las justificaciones españolas sobre los nuevos poderes de la CNE antes de decidir si expedienta a España por restringir la libertad de establecimiento y de movimiento de capitales.

El presidente del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso, defendió la creación de un regulador europeo para controlar las operaciones transfronterizas en la energía en la UE y volvió a criticar el nuevo nacionalismo económico para crear grandes empresas nacionales energéticas. Barroso abogó por la creación de "grandes empresas europeas de energía" para superar la fragmentación de los 25 mercados nacionales.

Barroso, al presentar el Libro Verde de la Energía, defendió crear una política energética europea, aunque admitió que no existe base jurídica en el Tratado de la UE para ello. Barroso destacó que el encarecimiento del petróleo, los riesgos en el suministro energético y la demanda mundial de energía de China e India requieren una política energética común de la UE.