El teléfono móvil también va a pagar parte de los recortes presupuestarios de las familias que está provocando la crisis económica, pese a las buenas perspectivas que se prometen las operadoras de telefonía. Un estudio del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos de Comunicación revela que el 16,7% de los usuarios piensan reducir su consumo de telefonía móvil y el 9,9% va a dar de baja servicios contratados, como el teléfono fijo o la banda ancha, o incluso ambos. El dato contrasta con las buenas perspectivas que se prometen las operadoras de telefonía, que exhiben estos días en el encuentro de telecomunicaciones de Santander sus resultados económicos, y cómo han contribuido a rebajar la inflación por los recortes tarifarios.

Según el estudio, el 39,14% de los usuarios gastan entre 10 y 30 euros al mes, mientras que el 31,57% consume entre 30 y 60 euros. De estos, la mayoría del gasto en todas las edades se hace en llamadas, y solo entre los más jóvenes es significativo (el 43,18% de la factura) el gasto que se hace en enviar mensajes.