Ampliar la base de cálculo de la pensión de jubilación desde la cotización de los últimos 15 años de la vida laboral del jubilado a 25 tiene como objetivo ahorrar recursos a la Seguridad Social. Con el mismo fin, el Pacto de Toledo ya la amplió desde 8 años a los 15 actuales. Y eso es así porque la mayor parte de los trabajadores tiene peor currículo de cotización a 25 años vista que a 15. De ahí que si se utilizan las bases más antiguas la pensión sea más baja. Los más beneficiados son los trabajadores que se han quedado en paro en los años inmediatamente anteriores al retiro.