Las personas que pretendan a partir de ahora blanquear dinero mediante operaciones inmobiliarias u otras transacciones similares lo tendrán más difícil. El Ministerio de Economía y Hacienda y el Consejo General del Notariado han creado una unidad de prevención que centralizará las informaciones comunicadas por los notarios sobre operaciones sospechosas. No sólo las analizará, sino que también se podrán relacionar con otras.

En el caso de que los expertos encuentren irregularidades, se notificarán a las autoridades para que investiguen. La organización de la unidad correrá a cargo del Consejo General del Notariado, que elegirá a los profesionales que trabajarán en este servicio.