Decisión expeditiva. La dirección general de Seguros, dependiente del Ministerio de Economía, decidió ayer intervenir y proceder a la disolución inmediata de Seguros Mercurio, propiedad de Viajes Marsans. Esta, a su vez, pertenece a los empresarios Gerardo Díaz Ferrán, presidente de la patronal CEOE, y a su socio, Gonzalo Pascual.

La medida se tomó "ante la grave situación patrimonial y de liquidez de la empresa", según la nota oficial del Gobierno. Mercurio estaba especializada en seguros para el transporte de pasajeros por carretera, sobre todo autobuses. Las cuentas de la compañía, que esta semana no hubiera podido ya hacer frente al pago de siniestros, presentan un patrimonio neto negativo (agujero patrimonial) de al menos 9 millones de euros, según admitió la empresa a través de un comunicado en el que atribuyó la situación a las pérdidas de 15 millones del año pasado como consecuencia de la competencia en el sector. En el 2008 ya perdió una cantidad similar.

BUSQUEDA INFRUCTUOSA Tras muchas reuniones con los accionistas, que eran también los titulares de la fallida Air Comet a la que se retiró en diciembre la licencia para volar, estos no aportaron "soluciones viables tendentes al restablecimiento de la situación patrimonial y a la inminente falta de la liquidez en la que se encuentra", según el organismo público dirigido por Ricardo Lozano. Las negociaciones con la empresa comenzaron hace un año. Fuentes de Mercurio lamentaron ayer que no les hubieran otorgado otros 45 días para lograr financiación. La firma trató de hallar comprador en el sector y se ofreció a Mapfre y Fiatc para evitar la disolución.

El organismo dependiente del Ministerio de Economía ha encargado al Consorcio de Compensación de Seguros que comience el procedimiento "ordenado de liquidación" de la entidad con el objetivo de proteger los intereses de los asegurados y terceros. El Consorcio buscará "soluciones de mercado" para salvaguardar los intereses de los clientes y de la plantilla. En ocasiones anteriores, las medidas han consistido en la venta de activos para saldar las deudas.

Seguros Mercurio, que comenzó a operar en 1988, cuenta en la actualidad con un total de 49.000 pólizas en vigor y una plantilla de 82 empleados. Los ingresos por primas se situaron en torno a los 45 millones de euros en el 2009.

DEFICIT DE SOLVENCIA Las cuentas del 2008, las últimas públicas depositadas en la dirección general de Seguros, ya resultaban preocupantes. En ese ejercicio, Seguros Mercurio contabilizó unas pérdidas de 14,8 millones de euros. Eso provocó que el margen de solvencia que se exige a las aseguradoras fuera negativo. En concreto, se situó en unos 98.000 euros, frente al mínimo legal de 10,2 millones.

A su vez, padecía un déficit de provisiones técnicas --suma destinada a cubrir posibles siniestros-- de casi seis millones. La entidad ingresó en el 2008 54,2 millones y en el 2009, en torno al 17% menos, unos 45 millones.

El volumen total del activo al cierre del 2008 ascendía a 70 millones de euros. El pasivo total ascendía a 67,8 millones. Como resultado de todo ello, el patrimonio neto era todavía de 2,3 millones de euros positivos.

La dirección general de Seguros ha revocado también la autorización administrativa a la compañía para ejercer la actividad aseguradora. Seguros Mercurio contaba con permiso para operar en los ramos de accidentes, vehículos terrestres, responsabilidad civil de automóviles, pérdidas pecuniarias diversas y defensa jurídica desde junio de 1988; el de robo, incendios y responsabilidad civil general desde noviembre de 1989 y el de asistencia desde febrero de 1990.