El Gobierno negocia con la industria automovilística un nuevo plan Prever que incluirá ayudas para los propietarios de coches viejos que compren un vehículo usado con menos antigüedad. La medida dará oxígeno al mercado automovilístico al tiempo que acelerará el rejuvenecimiento del parque de vehículos.

El sector considera agotado el actual Prever. El plan ofrece una subvención de 480 euros (79.865 pesetas) para coches con un mínimo de 10 años o de 721 euros (119.964 pesetas) si tienen motor de gasolina con plomo que se retiran al comprar un vehículo nuevo.

En el 2002, las 272.781 matriculaciones que entraron en el Prever supusieron una caída del 18,6% respecto al 2001 en un mercado en el que las ventas generales de coches descendieron el 6,6%. En el primer trimestre de este año, hay un 2% más de coches subvencionados por el Prever, mientras que el mercado general ha caído el 5,7%.

PIQUE ESTUDIA LA MEDIDA

Con el argumento del agotamiento del Prever y la finalización de su vigencia el próximo 31 de diciembre, el sector de la venta de coches ha encontrado más receptividad a un plan de ayudas más ambicioso en el ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, según confirmó ayer el presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles (Anfac), Jesús Ruiz-Beato, en la presentación del Salón del Automóvil de Barcelona.

Piqué realizó recientemente unas declaraciones en las que apoyó extender el Prever a los coches de ocasión para modernizar el parque automovilístico y aumentar la seguridad vial. Sin embargo, Ruiz-Beato admitió que el principal escollo se encuentra en Hacienda y Economía.

La ayuda por la compra de un coche usado para retirar uno más antiguo podría ser inferior a la que se dé por la adquisición de un vehículo nuevo, según dijo el presidente de Anfac. La propuesta del sector prevé que los coches usados en venta tengan un máximo de unos cuatro años para beneficiarse de las ayudas, y acortar de 10 a 7 años el mínimo exigible para el vehículo que se destina a chatarra.

En lugar de descontar la subvención del impuesto de matriculación, como se hace ahora con la compra de coches nuevos con ayudas del Prever, se baraja una deducción en la declaración del impuesto sobre la renta (IRPF).

PARQUE ENVEJECIDO

El presidente de Anfac dejó claro que no se trata de una ayuda a los fabricantes sino a la sociedad, puesto que un parque automovilístico envejecido, con un 35% de vehículos con más de 10 años, es inseguro y contaminante. Por ello, Ruiz-Beato pidió "generosidad" al Gobierno.

El presidente de la Asociación Nacional de Importadores de Automóviles (Aniacam), Germán López Madrid, considera que el plan de ayudas en vigor ha perdido su utilidad ya que "envejece" aún más el parque de vehículos.