Tanto en EEUU como en la eurozona los datos sobre la actividad de los servicios fueron positivos y los inversores no dudaron en aprovechar los deprimidos precios que dejaron las correcciones de la semana pasada para tomar posiciones. El Ibex repuntó el 2,3% y volvió a conectar con los 11.500 puntos, con el Santander y Telefónica en la parte alta de la tabla de ganancias. Ambas compañías, con fuerte implantación en Brasil, se vieron beneficiadas indirectamente por la decisión del COI de celebrar en Río de Janeiro los Juegos Olímpicos del 2016.

La atención pasará esta semana por los resultados empresariales, el miércoles se inicia el periodo para dar a conocer las cifras del tercer trimestre. Pero, antes de que esto suceda, el dato de septiembre del ISM no manufacturero, considerado un buen indicador adelantado de la actividad, fue positivo a ambos lados del Atlántico. Si en EEUU resultó el mejor desde mayo del 2008, en Europa volvió a subir después de 16 meses. Menos positivas, pero también de menor relevancia, resultaron las ventas del comercio minorista, que cayeron en agosto el 0,2% en los países de la zona del euro y el 0,3% en el conjunto de la UE, y la producción industrial en España, así como la confianza del consumidor. Con todas esas referencias en la mano, los inversores optaron por las compras. En el mercado español, los grandes valores tiraron del índice: el Santander, el 3,22% y Telefónica, el 3,52%. JP Morgan elevó el precio objetivo del banco a 12,4 euros, con una recomendación de sobreponderar, al tiempo que AC subió el precio a la operadora hasta los 24 euros.

El resto de los blue chips también se sumaron a la ganancias: el BBVA subió el 1,91%; Repsol, el 1,06% e Iberdrola, el 0,7%. No obstante, el valor más alcista del selectivo fue Técnicas Reunidas, que rebotó el 5,9%. Tras este valor, Banesto ganó el 3,78%, a la espera de que pasado mañana, como de costumbre, el primer banco en presentar los resultados trimestrales.