Las ventas de L´Oréal en el mundo crecieron el 8,1% el año pasado y, para el 2008, el director general de la primera multinacional de cosméticos, Jean Paul Agon, prevé nuevas alzas de entre el 6% y el 8%, pese a las turbulencias financieras. "Si hay crisis y si los tipos de interés son altos, se pueden dejar de comprar coches y casas, pero la venta de cosméticos sube mucho, porque suben mucho la moral", afirmó ayer Agon, durante la presentación de los resultados en el 2007.

Y debe ser verdad. En el 2007, en España, las ventas de cosméticos crecieron el 6%, pese a la desaceleración del consumo. La facturación de L´Oréal aumentó el 8,7% (más del doble que la media europea), hasta superar los 800 millones. Además del efecto psicológico que impulsa las ventas en tiempos de crisis, L´Oréal confía en otras potentes palancas para seguir creciendo. Sobre todo, en las economías emergentes. En el 2007, por primera vez, el mercado de cosméticos en estos países igualó en peso al de Europa (30% en cada caso) y, en el 2008, lo superará. Al peso creciente de Brasil, Rusia, la India y China ya se suma lo que en L´Oréal han bautizado, en inglés, como the next twelve (los 12 siguientes), entre los que están Polonia, Chequia, Turquía y Argentina.

PLAN DE ´GEOCOSMETICA´ Si L´Oréal lograra extender la cuota de mercado que tiene en Francia, cercana al 30%, a todos los países donde está presente, las ventas (de 16.110 millones de euros) se duplicarían hasta superar los 31.000 millones. Para ello, habría que hacer un gran esfuerzo en venta por habitante, que es de casi 30 euros en Francia; de 17 en España; y de pocos céntimos en la India o China. Para lograr la máxima penetración, L´Oréal ha desarrollado un plan de "geocosmética" para adaptar los productos a cada etnia y a las costumbres. La otra palanca de crecimiento es el envejecimiento y la creciente demanda de productos paliativos.