La tarifa regulada de la luz (TUR) puede subir en torno al 1,2% a partir del próximo lunes 1 de julio. La subasta Cesur de energía apunta a un encarecimiento de ese porcentaje para el tercer trimestre del año. El precio del componente energético de la tarifa, que supone casi la mitad del precio final, ha subido un 3 % en la puja.
A partir de esos datos, si el ministerio de Industria mantiene su intención de congelar los peajes, que son las cantidades con las que se retribuyen las actividades reguladas, como el transporte, la distribución o las primas a las energías renovables, la tarifa subiría en torno a un 1,2 % o un 1,3 %.
Esta subida se produciría después de que la luz registrara un encarecimiento del 3 % en enero pasado y se abaratara un 6,6 % en abril, la primera bajada de precio desde la creación de la TUR en el 2009.
La tarifa se compone de tres elementos principales: el componente energético, que supone más de un tercio y que se determina en la subasta; los peajes, que son casi la mitad y que fija el Gobierno, y los impuestos, que rondan el 20 %. El ministro de Industria, José Manuel Soria, ha mostrado su intención de mantener congelada la parte regulada del recibo en esta revisión, de manera que la evolución de la TUR dependería exclusivamente del componente energético.
El Gobierno prevé aprobar en breve una reforma del sistema energético para equilibrar de forma definitiva los ingresos y gastos del sistema eléctrico. Se trata de acabar con el desfase que ha generado el denominado déficit de tarifa, una deuda que supera ya los 28.000 millones de euros y que conlleva que los usuarios futuros paguen parte del consumo de los actuales.
