"Puede haber más dolor por venir", advierte el semanario británico The Economist en un estudio. Sus estimaciones cuantifican en más de 27.000 millones de dólares (19.000 millones de euros) las pérdidas provocadas hasta el momento en los mercados de capitales por la crisis hipotecaria y financiera.

Hasta ahora, la principal víctima de la crisis era el presidente del banco de inversión norteamericano Merrill Lynch, Stan O´Neal, pero ahora le ha tocado a Charles Prince, máximo ejecutivo de Citigroup.

Las firmas auditoras están presionando a los bancos para que valoren sus activos al precio actual del mercado que refleje la realidad de sus transacciones más recientes. En EEUU los impagos en las tarjetas de crédito están subiendo, lo que dañará más los títulos respaldados por activos.