El termómetro revela que el enfermo --las economías industrializadas-- mejora. Eso es lo que se desprende de los indicadores compuestos avanzados que elabora la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que integra a las 30 principales economías industrializadas del mundo.

El índice que elaboran los analistas de este organismo correspondiente a julio revela "fuertes signos de recuperación", al situarse en 97,8 sobre una base 100, con un avance de 1,5 puntos con respecto al mes anterior, aunque 1,9 por debajo de un año atrás. El estudio destaca las mejoras en las siete principales economías del mundo, en especial Francia e Italia, así como China, Rusia e India. Pero también España forma parte de este grupo y supera el nivel 100 (100,97) por primera vez desde principios del año pasado. En un año, el indicador ha subido 2,51 puntos, y en el último mes, 1,73.

Estos datos provocaron satisfacción en el Gobierno español, acostumbrado a escuchar vaticinios, desde el Fondo Monetario Internacional hasta la Comisión Europea, sobre una demora de la recuperación en España. Por eso la vicepresidenta económica, Elena Salgado, interpretó que las últimas cifras prueban que "la recuperación puede comenzar en un breve plazo".

La mayor parte de los indicadores sobre la economía española no dan todavía para grandes alegrías. El PIB cayó el 4,2% en el segundo trimestre con respecto al mismo periodo de un año atrás y descendió el 1,1% con respecto al periodo enero-marzo.

Sin embargo se detectan síntomas de mejora. Las exportaciones de bienes y servicios bajaron el 4,7% en junio, una tasa que, aun siendo negativa, fue casi tres veces menor que la del mes anterior. Las importaciones también ralentizaron su caída. En el consumo privado destacan las matriculaciones de coches, que igualaron en agosto las de un año antes y dejaron de caer por primera vez en 15 meses.

DEL DECLIVE A LA EXPANSION El índice que elabora la OCDE se emplea para analizar la tendencia de los ciclos económicos. En principio, se destacan cuatro fases cualitativas: la posible expansión, cuando el indicador está por encima de 100 y tiene tendencia al alza; la posible ralentización, cuando está por encima de 100 pero con tendencia a la baja; el posible parón cuando está por debajo de 100 y con tendencia a la baja y la recuperación cuando está por debajo de 100 pero con tendencia al alza.

El ascenso en el caso de la zona del euro durante julio fue de 1,9 puntos, hasta 100,5, que en este caso es 1,4 puntos superior al nivel de julio de 2008. El Reino Unido registró un ascenso de 1,3 puntos, hasta 100,6. EEUU tuvo un alza de 1,6 puntos en julio, hasta 96, aunque sigue 4,3 puntos por debajo de hace 12 meses. La situación se repite para Japón, con un ascenso de 1,4 puntos en julio, hasta 94,9, que son 6,6 puntos por debajo del nivel de hace un año.