La palabra tapering empezó a circular entre analistas, inversores y periodistas atentos al día a día en Wall Street en la época del gobernador de la Fed, Ben Bernanke. Aludía a una operación de disminuir el diámetro, la anchura y el grosor de un objeto.Un circunloquio para advertir que la lluvia artificial e imparable de dólares --de euros en la eurozona--, estaba a punto de reducir su tamaño. No ocurrió entonces, pero ya nadie duda de que vaya a ocurrir entre diciembre y marzo. Janet Yellen, presidenta de la Fed no amaga la decisión.Y Draghi solo puede aspirar a la prórroga. Con estos nuevos parámetros de reducción, las grandes bolsas se han movido con precaución. El Ibex-35 recupera, volátil, un 0,92%, hasta los 8.718 puntos.