El presidente del Grupo Volkswagen (al que pertenece Seat), Herbert Diess, se ha dirigido a los trabajadores de la firma española para agradecer el trabajo hecho por Luca de Meo, expresidente de la marca, y el resto de la plantilla. El directivo alemán afirma que la compañía "es hoy una marca sólida gracias al duro trabajo llevado a cabo por todo el equipo durante estos años". "Esto no va a cambiar", ha añadido.

Luca de Meo dejó Seat el 7 de enero como preámbulo de su probable salida a Renault. El expresidente de la firma de Martorell, que estaría negociando los términos de su salida del Grupo Volkswagen, llegó a Seat en 2015, encontrándose una empresa con pérdidas. Un año después, llegaron los beneficios y, a partir de entonces, un crecimiento sostenido por una estrategia marcada por la optimización y la mejora de su cartera de productos que llevó a Seat a las mejores cifras de producción y ventas de su historia el año pasado.

Diess ha agradecido a De Meo su "inestimable contribución a la empresa" y su "gran contribución al éxito del Grupo Volkswagen y Audi desde 2009 -cuando empezó a trabajar en el consorcio- hasta ahora".

UN 2020 PLAGADO DE RETOS

Diess no ha querido cerrar la carta sin referirse a las dificultades a las que Seat, y todo el sector en general, se enfrentará en 2020. "Será un año lleno de retos, como el cumplimiento de los objetivos de CO2, enormes inversiones para electrificar la gama y la situación en muchos mercados, con un crecimiento moderado e incluso en declive", ha recordado.

El máximo dirigente del Grupo Volkswagen se ha despedido asegurando que el consorcio sigue comprometido con la fábrica de Martorell, "que cuenta con un equipo competente y dedicado" y con la marca Cupra "impulsando su estrategia, que ha arrancado con éxito".