El presidente de Seat, Andreas Schleef, se mostró "satisfecho" por los resultados que está obteniendo la compañía en el 2006, superiores a los del año pasado, y abrió la puerta a que, en un futuro, se reincorporen a la empresa algunos de los trabajadores despedidos tras el último expediente de regulación de empleo, y que lo hagan a través del denominado contrato de relevo.

Durante la inauguración de la nueva sede corporativa de la compañía en Martorell (Barcelona), a la que asistió el presidente catalán, Pasqual Maragall, el presidente de la compañía afirmó que el volumen de ventas ha crecido en los primeros meses del año, situándose en alguno de ellos como líder del mercado. Pero explicó que, por ahora, con la plantilla existente se cubren las necesidades e, incluso, podría incrementarse la producción. No obstante, no descartó que "en un futuro próximo" se plantee a los sindicatos el retorno de algunos de los trabajadores que abandonaron la empresa mediante el contrato relevo.

Seat presentó en diciembre del 2005 una regulación de empleo que afectó a 660 personas. El contrato de relevo estaba vinculado, en un principio, a prejubilaciones pactadas, pero, al final, quedó condicionado al futuro regreso de afectados por el expediente de regulación.