La bolsa española perdió hoy el 2,97 por ciento y se situó en el nivel de 8.600 puntos, lastrada por la caída de Wall Street y por el descenso de los grandes bancos y principales empresas españolas.

Así, el principal indicador del mercado español, el Ibex-35, bajó 265,10 puntos, el 2,97 por ciento, hasta 8.646,80 puntos, con lo que el índice acumula unas pérdidas desde el comienzo de año del 43,05 por ciento.

En Europa, con el euro a 1,253 dólares, las principales plazas terminaron con pérdidas: París bajó el 3,07 por ciento; Fráncfort, el 2,96 por ciento; Milán, el 2,33 por ciento, y Londres, el 1,52 por ciento.

Al principio de la sesión, la bolsa española rebotaba por encima de un punto porcentual y lograba asomarse al nivel de 9.000 puntos, a pesar de que Wall Street cerrara el martes en negativo por segunda sesión consecutiva.

En el plano macroeconómico, los inversores vieron con buenos ojos la publicación de la tasa de inflación interanual española, que bajó en octubre nueve décimas y se situó en el 3,6 por ciento, el mismo nivel que hace un año.

No obstante, la bolsa española, tras deambular sobre el nivel de cierre de la víspera, cambió de signo con la apertura en negativo del parqué neoyorquino, que perdía más del 2 por ciento, afectado por la revisión a la baja de las perspectivas de beneficio de la cadena de electrodomésticos estadounidense Best Buy, indicativo de un descenso del consumo y de la ralentización económica.

En España, la jornada bursátil estuvo protagonizada por Sacyr-Vallehermoso y Repsol, después de que el viceprimer ministro ruso, Alexander Zhukov, anunciara esta tarde que la empresa estatal Gazprom estudia comprar el 20 por ciento de la petrolera hispano argentina que posee el grupo constructor.

Así, Sacyr, se anotó la segunda mayor subida del Ibex-35 al avanzar el 5,30 por ciento, mientras que Repsol ganó el 0,14 por ciento, a pesar de la caída del precio del petróleo Brent que cotizaba a 53 dólares, un 5 por ciento menos que ayer.

Además, los grandes bancos también arrastraron a la bolsa, por los coletazos de la ampliación de capital aprobada el lunes por el Banco Santander, que encabezó las caídas del Ibex con el 7,61 por ciento. BBVA cedió el 3,51 por ciento.

Del resto de las grandes compañías del Ibex-35, Iberdrola cayó el 3,14 por ciento y Telefónica, el 1,02 por ciento. Por detrás del Banco Santander, la mayor caída del Ibex-35 fue para Técnicas Reunidas, que cayó el 6,48 por ciento, seguida de Endesa, que cedió el 4,58 por ciento.

Por el contrario, Mapfre lideró las ganancias del Ibex-35 al subir el 8,26 por ciento, seguida de Sacyr-Vallehermoso y de Bankinter, que ganó el 2,11 por ciento.

En el mercado continuo las mayores caídas fueron para Realia y para ArcelorMittal, que se dejaron el 10,64 por ciento y el 9,38 por ciento, respectivamente, mientras que Banco de Valencia se anotó la mayor subida de la bolsa, el 13,57 por ciento, tras anunciar que se incorpora al índice global MSCI de Morgan Stanley.

La rentabilidad de la deuda española a largo plazo bajaba dos centésimas y se situaba en el 4,18 por ciento, en tanto que el dinero negociado en el mercado continuo aumentaba a 4.150,21 millones de euros.