«Hace tres años, durante mi embarazo y ante la prohibición de comer jamón durante el periodo de gestación me pregunté el porqué del aroma y particular sabor del jamón ibérico. Entonces rápidamente pensé que la bellota, principal alimento del cerdo ibérico, tenía que ver algo. No dudé en que la marca tenía que decir algo de mí, de mi historia y de mi apuesta personal por el medio ambiente y ahí nació Bichina Natural».