Juan Francisco Cruz Plaza es un emeritense "de toda la vida" --como asegura-- pese a haber nacido en Badajoz. Tiene 27 años y en su currículum consta que completó el primer ciclo de Filología Hispánica y posteriormente se licenció en Periodismo.

Pero cuando decidió dar el salto y pasar de la universidad al mercado laboral se estrelló con la cruda realidad. A pesar de ser licenciado, a pesar de estar en un sector considerado en la región entre los más pujantes en los últimos años... acabó haciendo "una especie de prácticas" en un medio digital. Por supuesto sin suelto y por supuesto sin contrato.

Por eso, cuando acabó su trabajo de becario decidió cruzar el charco y marcharse a Edimburgo para aprender inglés. Su decepción era tal que antes de irse recibió una oferta de trabajo de Europa Press Madrid y la rechazó porque "era hacer lo que me gusta pero por muy poco dinero". Así que se fue a Edimburgo, donde desde hace unos 9 meses mejora su inglés y trabaja de vez en cuando en empleos temporales e incluso por días.

Lo que sí tiene claro es que cuando regrese a España no volverá a su región natal, sino que irá a buscar trabajo a Madrid, "porque me gusta más y porque Extremadura se me queda pequeña... es un poco por todo".

Un buen trabajo, difícil

Y es que asegura, tanto por su experiencia como por la de muchos de sus amigos, que "es difícil encontrar un buen trabajo en Extremadura". En este sentido, explica que algunos de ellos trabajan en algunas de las productoras que han proliferado en la comunidad en los últimos tiempos al amparo del nacimiento de Canal Extremadura Televisión. El problema es que "están en malas condiciones". La conclusión, afirma, es clara: "Mis amigos o están en paro o y si tienen trabajo es mal pagado".

Si eso puede aplicarse en muchos ámbitos, cree que en el sector de los medios de comunicación "están peor, porque hay muchos puestos por 600 euros". Lo que no tiene claro es qué pueden hacer los partidos políticos para mejorar la situación.

Más formación

Sí se muestra partidario de que incluyan en sus programas el fomento de aquellos programas que contribuyen a mejorar la cualificación profesional de los jóvenes, como pueden ser los cursos o talleres de formación. Aún así, duda. "No sé si esto depende tanto de los políticos o más bien es culpa de las propias empresas, realmente no creo que la política tenga mucho que ver..."