Miguel Celdrán concurre por segunda vez a las elecciones generales desde que es alcalde de Badajoz, en ésta su tercera legislatura con mayoría absoluta. En el 2000, no sólo ganó, sino que por primera vez arrastró a sus 2 compañeros de lista dejando un sólo senador al PSOE. En esta ocasión espera repetir la jugada.

--Ya fue elegido y tuvo que renunciar. Si sale ahora, ¿qué?

--La idea es compatibilizar los dos cargos. Tener contacto directo con la Administración del Estado, si gana el PP, es importante. La vez anterior se dio una situación especial en el partido y creí que debía renunciar. No creo que esa situación se vuelva a repetir.

--¿Por qué deberían votarle?

--Tengo una trayectoria política conocida de nueve años al frente de este ayuntamiento, que han ratificado los ciudadanos. Se han ganado tres elecciones por mayoría absoluta. Creo que es importante nuestra representación a nivel nacional.

--¿Se debe reformar el Senado?

--No lo considero prioritario, pero sí recomendable cierta entrada a las peticiones de las autonomías. Propuestas como que las comunidades aporten los senadores no me parecen oportunas. Con el nacionalismo actual no podría salir el Plan Hidrológico Nacional, algo sumamente beneficioso para España. Las comunidades deben tener voz y voto en el Senado, pero dentro de una reglamentación nacional.

--Se acusa al PP de utilizar el Senado para hurtar el debate en el Congreso e introducir cambios en normas fundamentales. ¿Qué le parece?

-- Es curioso, cuando gana el PSOE saca su programa adelante y no pasa nada, pero también es típico del PSOE que cuando no gobierna, el que ha obtenido la confianza no puede desarrollar su programa porque es un dictador. El que gana debe cumplir su programa, si es posible consensuado, y si no, tiene que prevalecer el criterio de quien ha obtenido la confianza.

--¿Cuál es el cumplimiento del programa del PP, estos cuatro años, en la provincia?

--Creo que muy alto, del 80 al 90%. A la vista está en agricultura, creación de industria, bajada de intereses, supresión del servicio militar, o la lucha antiterrorista, a nivel nacional. Y aquí, reducción del paro del 35% al 24%, el AVE, la N-630, y tantas cosas.

--¿Cómo ve la campaña?

--Hoy no la veo mal, se desarrolla con sosiego; hombre, siempre hay alguna metedura de pata, pero creo que con normalidad, quitando algunas pinceladas sin trascendencia.

--¿Ve algún peligro el día 15, según el resultado electoral?

--No, porque tengo firme confianza en quién va a ganar. En otro caso, no miedo, pero sí temor por lo que he oído. No me creo que Zapatero no vaya a gobernar porque no tenga mayoría absoluta; eso no ha pasado en Madrid, cómo va a pasar aquí. En eso sí tengo una intranquilidad. El BNG, Ibarretxe, Rovira, todos los independentistas quieren que gane Zapatero, será porque con él harán lo que les dé la gana, y eso me intranquiliza, pero por esas decisiones, no por la persona de Zapatero; a los otros les tengo pánico.